Recuerdo en mi infancia leer cómics de Los Vengadores como algo fascinante. Momentos privados de diversión que compartíamos los autores, los superhéroes y yo entre las cuatro paredes silenciosas de mi habitación... pero ahora cuando escucho que se va a hacer tal o cual adaptación de unos personajes memorables me echo a temblar, porque el resultado suele ser nefasto. Y en esta ocasión, se repite por enésima vez el error. Mucho ruido y pocas nueces. Miles de explosiones y nada que contar. Stan Lee conseguía siempre que empatizaras con esos poderosos personajes y sus problemas rutinarios. Ya no hay nada de eso; en una superproducción el equipo de efectos especiales tiene mayor peso que el de guionistas. Mal vamos con esos parámetros.
En cualquier caso, siempre podemos salvar y guardar en nuestro pequeño cubo pequeñas gotas de un océano desbocado. Se aprecian unas pinceladas de homenaje a este tipo de historietas aunque se queda en un quiero y no puedo. O lo que es peor, un puedo y no quiero.
Nota: 3
Lo mejor: Ironman y su cinismo.
Lo peor: La primera hora no aporta nada
Con el patrocinio de Multicines La Vailet y CasaHobby
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada